Oregón es un estado libre de impuestos y no tiene impuestos sobre ventas.
Sin embargo, a partir de 2018, los estados pueden exigir a las empresas de Oregón que cobren y remitan el impuesto sobre las ventas a los consumidores del estado, incluso si el vendedor no se encuentra en el estado del consumidor. Las empresas de Oregón que venden bienes o servicios a otros estados deberán recaudar y remitir impuestos sobre las ventas a los estados que recaudan impuestos sobre las ventas si cumplen con los requisitos para registrarse como contribuyentes de un estado en particular.
Si los residentes de Oregón compran bienes o servicios en línea, no están obligados a pagar impuestos sobre las ventas en otro estado. Sin embargo, el impuesto sobre las ventas puede imponerse a las compras en línea en casos excepcionales. La excepción son los boletos de avión comprados en línea, en cuyo caso se le cobrará un impuesto federal. También puede estar sujeto a impuestos locales en el estado donde alquila un hotel o alquila un automóvil en otro estado, incluso si lo hace en línea mientras se encuentra en Oregón.
Si su empresa está ubicada y hace negocios desde Oregón, pero vende o compra productos en un estado que tiene un impuesto sobre las ventas y necesita información sobre la política fiscal de ese estado para los no residentes, comuníquese con la agencia tributaria de ese estado.